En Septiembre del año pasado escribíamos un artículo que hacía referencia al porqué de la convergencia fijo-móvil, nunca más actual ante el lanzamiento nuevamente del Movistar en casa.
Para poder evaluar las oportunidades de la convergencia fijo-móvil en nuestro país, es necesario analizar los mercados implicados:
- El mercado de telefonía fija en los últimos cuatro años muestra un crecimiento vegetativo en cantidad de líneas y de consumo. Se encuentra regulado fuertemente y el ajuste de tarifas parece lejano, tornándose un mercado poco atractivo para cualquier ingresante.
- El mercado de telefonía celular como ya hemos explicado antes, es un mercado que se encuentra en su máximo punto de penetración, con un ARPU estancado en los últimos años, que se sostiene gracias los Servicios de Valor Agregado, principalmente el SMS. Bajo estos indicadores se ha vuelto un mercado muy competitivo por captar nuevos clientes de la competencia. (ver notas relacionadas)
- Internet: aún se encuentra en crecimiento, sobretodo el mercado de Banda Ancha con promedios que superan el 60% (ver nota relacionada), pero que en ciertas zonas urbanas ha llegado al límite de penetración y genera una gran competencia de precios y de servicios. Las tres grandes empresas que concentran más del 80% del mercado, están buscando otros mercados a nivel nacional no tan desarrollados. El horizonte de penetración potencial bajo este crecimiento y la existencia actual de PCs en hogares no superaría los 3 años.
Esto muestra de alguna manera que las oportunidades de negocio para los carriers locales se empiezan a cerrar ya que estos mercados no tendrán crecimientos explosivos como en los últimos cuatro años.
El gran dilema de los próximos años será cómo conseguir nuevos clientes y nuevos ingresos habiendo mercados fuertemente regulados, no regulados pero llegando al límite de crecimiento y otros con horizontes de saturación cercanos.
Sin embargo, aún quedan segmentos por penetrar que bajo nuevas modalidades pueden ser atacados.