Ante este escenario el mercado de telecomunicaciones a nivel local no permaneció indemne. En el período 1999-2002, la telefonía fija medida en pesos cayó un 19% y en dólares descendió un 76% (hay que recordar que el dólar en esa época rozó los 4 pesos y se preveía que estuviera en valores cercanos a los 10 pesos). En cuanto a las líneas en servicio, pasamos del pico máximo en ese período de 8,4 millones a 7,9 o sea una caída de más de 500 mil líneas. Ante esta sangría de clientes, las compañías idearon planes que permitieron a los hogares controlar su gasto y consumir a través de tarjetas prepagas de telefonía fija, dando lugar a un crecimiento muy fuerte de su consumo.
El 2008 no será afectado por la crisis actual ya que se prevé que el número de líneas en servicio llegue a 9 millones dando un 1,4% de crecimiento con respecto al 2007 y un mercado de 7.300 millones de pesos en términos monetarios. Esto mostraría también un crecimiento del orden del 5% con respecto al año anterior. Pero la gran incógnita es el 2009, y bajo este parámetro y dadas las condiciones actuales que distan ciertamente de la crisis del 2001 podemos decir que no se prevé una caída parecida a ese período, aunque sí una desaceleración del crecimiento y retracción del consumo, que podría afectar el gasto promedio por línea y la reactivación del mercado de tarjetas prepagas de telefonía fija, sobre todo en aquellos hogares con menos recursos.
En la próxima edición analizaremos el mercado de telefonía celular y el de Internet.